San Francisco de Sales (1567-1622) estudió derecho y teología en París y Padua. Más tarde fue obispo de Ginebra (Suiza).
Trabajó incansablemente para ayudar a los pobres y para defender la fe católica del ataque de los calvinistas. Fue alegre, paciente y optimista.
Fundó la orden de las visitandinas y escribió varios libros: Tratado del amor de Dios, Introducción a la vida devota, Defensa del estandarte de la Cruz, Conferencias espirituales, etc.
También escribía hojas con reflexiones espirituales, que distribuía a quienes acudían a misa e incluso las repartía de casa en casa. Por eso es patrón de los periodistas.
Pensamientos tomados de sus escritos:
- «Quiero una piedad dulce, suave, agradable, apacible; en una palabra, una piedad franca y que se haga amar de Dios primeramente y después de los hombres».
- «La humildad nos perfecciona en lo que se refiere a Dios, y la mansedumbre en lo que toca al prójimo».
- «Yo he repetido con frecuencia que la mejor manera de predicar a los herejes es el amor, aun sin decir una sola palabra de refutación contra sus doctrinas».
- «Caminemos con nuestros hermanos y compañeros con dulzura, paz y amor; y te lo digo con toda claridad y sin excepción alguna: no te enojes jamás, si es posible; por ningún pretexto des en tu corazón entrada al enojo».
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