Reflexiones diarias sobre argumentos de espiritualidad y vida carmelitana, con incursiones en el mundo del arte y de la cultura

sábado, 29 de julio de 2023

Visitando Segovia, donde se conserva el sepulcro de san Juan de la Cruz


Segovia es una ciudad patrimonio de la humanidad, situada a 1005 metros de altura sobre el nivel del mar y rodeada en parte por el río Eresma. Habitada desde hace unos 60.000 años por grupos de neandertales primero y de sapiens después. Más tarde hubo un castro celtíbero y desde el siglo II a. C. una ciudad romana. Tras la dominación musulmana, fue repoblada en 1088. Fue sede de la corte de los reyes castellanos de la dinastía Trastámara de mediados del siglo XIV a mediados del siglo XVI.

Tiene unos 50.000 habitantes. Sus monumentos más famosos son el acueducto romano (que llevaba el agua desde un manantial a 17 km de la ciudad. En su parte final mide 28 metros de altura, más 6 bajo tierra, que sirven de cimiento) y el alcázar (palacio de los antiguos reyes de Castilla, con impresionantes artesonados. Es uno de los castillos más famosos del mundo, que sirvió de inspiración a varias películas de Walt Disney). Para los carmelitas son también importantes el monasterio de monjas carmelitas descalzas, fundado por santa Teresa, y el convento de los frailes, donde se conserva el sepulcro de san Juan de la Cruz.

Según las leyendas antiguas, Segovia fue fundada Hércules, el hijo de Júpiter, famoso por los doce trabajos. Precisamente, uno de sus trabajos fue viajar hasta el fin del mundo conocido (la Hispania de entonces), para robar el ganado del gigante Gerión. Esa habría sido la ocasión para fundar la ciudad de Segovia.

El acueducto romano de Segovia llevaba las aguas a la ciudad desde un manantial situado a 17 kilómetros. En el tramo final tiene 163 arcos (44 dobles), con una altura de 28 metros en la parte más elevada. Estuvo en funcionamiento durante casi 2000 años, hasta 1973, y los vehículos cruzaban por debajo de los arcos hasta 1992.

A los pies del acueducto hay una réplica de la famosa loba amamantando a Rómulo y Remo, tal como se encuentra en la plaza capitolina de Roma, junto a su ayuntamiento. Fue un regalo de aquella ciudad a Segovia el año 1974, cuando se cumplieron 2000 años de la construcción del acueducto.

El alcázar es un resumen de la historia y del arte de España: antiguo castro celtíbero y romano, fortaleza medieval, palacio real, prisión de estado, academia de artillería y archivo histórico militar. Conserva importantes artesonados mudéjares, muebles antiguos, armería, etc. El castillo sirvió de inspiración en algunas películas de Walt Disney, como la Cenicienta y Blancanieves.

La catedral es conocida como «la dama de las catedrales» por su elegancia. Es la última catedral construida en estilo gótico, ya en el siglo XVI, cuando se iba imponiendo el estilo renacentista. En su construcción se reaprovecharon varios elementos de la antigua catedral, que estaba situada junto al alcázar. Tiene 109 metros de larga, 50 de ancha y 30 metros de altura en las bóvedas. El altar mayor, diseñado por Francisco Sabatini es neoclásico, del siglo XVIII. Está realizado en mármoles y bronces. La Virgen de la paz que lo preside es del siglo XIII.

La sillería del coro, del siglo XV es de estilo gótico flamígero y proviene de la antigua catedral. En el trascoro, que fue trasladado en 1782 desde el palacio de Riofrío, se conservan los restos de san Frutos en una urna de plata del siglo XVII.

Todas las capillas laterales son espectaculares y contienen numerosas obras de arte, pero destaca entre todas la de la Inmaculada Concepción, del año 1531, decorada en 1622. La verja es de madera de caoba americana. También es impresionante el retablo de José Churriguera que se conserva en la capilla de los Ayala, realizado en 1686, al que se le añade el tabernáculo en 1718. La catedral conserva una de las mejores colecciones de vidrieras renacentistas de Europa.

El claustro, de estilo gótico flamígero, fue trasladado piedra a piedra. En él están la sala capitular y los museos catedralicios, con importantes tapices y pinturas. Paseando por sus calles se pueden distinguir numerosos palacios con escudos nobiliarios, conventos e iglesias.

El convento de los carmelitas descalzos de Segovia fue fundado en 1586. San Juan de la Cruz fue superior de la comunidad, trabajó en la construcción del mismo y está enterrado en su iglesia. Tanto el convento, como el centro de espiritualidad, la huerta y las ermitas están llenos de recuerdos del santo.

Al lado está el santuario de la patrona: la Virgen de la Fuencisla. Como de muchas otras, la leyenda dice que fue realizada por san Lucas y traída a España por varones apostólicos, escondida durante la invasión musulmana y reencontrada después de la Reconquista. Dentro hay un valioso retablo barroco y una imponente reja del mismo estilo.


En otras ocasiones he dedicado entradas con muchas fotografías al acueducto y al convento de san Juan de la Cruz, que pueden consultar aquí, si lo desean:

El acueducto romano de Segovia.

El convento y sepulcro de san Juan de la Cruz en Segovia.

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