Reflexiones diarias sobre argumentos de espiritualidad y vida carmelitana, con incursiones en el mundo del arte y de la cultura

lunes, 18 de noviembre de 2024

12 fotografías espectaculares de Roma (con sus historias)


He vivido
varios años en Roma y he hablado muchas veces en el blog de sus monumentos, parques, fuentes, obeliscos, etc. Aquí recojo algunas fotos de sus lugares más típicos y amados por los turistas. Comenzamos con una vista de las características cúpulas de las iglesias de Roma, tan bellas e inolvidables. Al fondo se aprecia el monumento a Víctor Manuel II en la «piazza Venezia». A su derecha se aprecia la torre del «palazzo senatorio» (actual sede representativa del ayuntamiento) situado en la maravillosa «piazza del campidoglio».

Los restos del Coliseo, el anfiteatro Flavio, construido en el siglo I de nuestra era, en el que 65000 espectadores podían contemplar las luchas de los gladiadores contra las fieras. 28 montacargas dotados de un complejo sistema de poleas, cuerdas y contrapesos permitía subir a los osos, lobos, ciervos y otros animales desde los subterráneos hasta la arena.

La «fontana di Trevi», la más famosa y teatral de las fuentes barrocas de la ciudad, en la que desemboca el agua proveniente del acueducto del «acqua vergine», cuyo manantial está a unos 20 kilómetros de la ciudad. Estos días la están restaurando (como casi todos los monumentos de Roma), en preparación al jubileo del 2025.

Vista nocturna del río Tíber y de la basílica de san Pedro en el Vaticano. En primer término se ve el puente Victorio Enmanuel II, construido entre 1886 y 1911. Al fondo, la cúpula diseñada por Miguel Ángel en el siglo XVI.

Fachada del Panteón de Agripa con sus columnas de más de 30 metros cada una y de una sola pieza de granito africano. El edificio actual es del siglo II d. C., transformado en iglesia cristiana en el siglo VII d. C.

Restos del foro romano, en el que se encontraban los principales edificios administrativos, templos, mercados y arcos de triunfo. En primera fila se ven los restos del templo de Saturno (construido entre el 501 y el 498 a. C.) y del tabulario (el archivo del siglo I a. C. que conservaba las leyes y tratados).

Calles del Trastévere, el barrio popular «al otro lado del río Tíber, con sus calles adoquinadas (los adoquines en Roma se llaman «sanpietrini») y sus calles estrechas llenas de pizzerías y otros negocios para los turistas.

Plaza Navona, construida sobre el antiguo estadio de Domiciano, al que los romanos acudían a ver los «agones» (juegos), por lo que la iglesia que se ve a la izquierda, con fachada de Borromini, se llama de santa Inés «in agone». Antes se aprecia la fachada del palacio Pamphili, actual embajada de Brasil. La fuente que se ve es la del Moro, diseñada por por Giacomo della Porta en 1575, aunque la imagen del moro que la corona es obra de Gian Lorenzo Bernini, realizada en 1653. Más adelante están las fuentes de los cuatro ríos (se aprecia el obelisco en el centro) y la de Neptuno.

Plaza de España, con la iglesia francesa de la «Trinità dei Monti» al fondo, en la cima de la gran escalinata de piedra, sobre el monte Pincio. El templo es del siglo XV, con fachada del siglo XVI y delante el obelisco Salustiano, de granito rojo (uno de los trece llevados desde Egipto por los emperadores romanos). En primer término se aprecia la bellísima fuente «de la Barcaza», realizada entre 1627 y 1629 por Pietro Bernini, el padre del famosísimo arquitecto y escultor Gian Lorenzo Bernini.

«Piazza del Popolo» a vista de dron. En el centro está la puerta del popolo, del siglo XVI al exterior y del XVII al interior. En época clásica era la salida de las murallas aurelianas hacia la vía Flaminia. Nada más traspasarla, a la izquierda está la iglesia de santa María del Popolo, del siglo XI con añadidos posteriores, construida sobre el lugar donde estaba la sepultura de Nerón. Estaba unida al convento de los agustinos, en el que se hospedó Martín Lutero durante su estancia en Roma. A la derecha está el cuartel general de los carabineros del Lazio. En el centro de la plaza está el obelisco Flaminio, del siglo XIII a. C. Fue llevado a Roma por el emperador Augusto el año 10 a. C. Al fondo hay dos iglesias «gemelas»: Santa María in Montesanto (1675) y Santa María dei Miracoli (1678), que constituyen los dos polos del «Tridente», formado por la Vía del Corso, la Vía del Babuino y la Vía di Ripetta.

La «isola tiberina», que antiguamente fue cárcel para criminales y desde el siglo III a. C. albergó un famoso templo en honor de Esculapio, el dios romano de la medicina. Hoy la mitad de la isla está ocupada por el hospital de los hermanos de san Juan de Dios y la otra mitad tiene la basílica de san Bartolomé, el convento de los franciscanos y un hospital judío. Se accede desde los dos puentes más antiguos de Roma, que conservan su estructura original y siguen en uso después de más de 2000 años.

Los actuales reyes de Roma y sus monumentos son los gatos, como estos dos retratados en las ruinas del Coliseo. En la época clásica ya eran abundantes en la ciudad, están representados en muchas esculturas antiguas y también hay una «vía della Gatta». Hay más de 5000 colonias felinas censadas por el ayuntamiento de Roma, se calcula que unos 300.000 viven en libertad en la ciudad y cada año se publican numerosos calendarios y libros con fotografías y anécdotas relacionadas con ellos.

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Les recuerdo que el próximo año será «año jubilar». Cumpliendo con la antigua tradición de peregrinar a Roma, la diócesis de Osma Soria realizará una preciosa peregrinación del 13 al 19 de octubre de 2025. La presidirá nuestro señor obispo y se encargará de las explicaciones históricas, culturales y religiosas el padre Eduardo Sanz de Miguel, delegado diocesano de peregrinaciones.

Quienes lo deseen, podrán continuar la peregrinación hasta el 27 de octubre, visitando Nápoles, Bari, San Giovanni Rotondo y otros lugares de interés en el sur de Italia. Pronto tendremos información más concreta sobre los vuelos y el precio.

2 comentarios:

  1. Me quedo con la Plaza Navona y el Trastevere da hace años
    Con el de ahora no.
    Ya no es el mismo

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  2. Que peregrinación tan linda p. Eduardo, como digo los viajes son un regalo extraordinario de Dios.

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