Luisa Fernanda tiene que decidir entre dos amores: un militar guapo, pero superficial, y un hombre de campo, maduro y honesto. Como san Antonio de Padua, que es uno de los santos más populares del calendario, ha sido considerado tradicionalmente el abogado para encontrar las cosas perdidas y también para encontrar un buen marido, se le introduce con naturalidad en este canto tan conocido.
Hoy es la fiesta de san Antonio y pienso que es buena ocasión para recordarlo. (En otras entradas he recogido cosas más serias, como su biografía, un reportaje sobre la basílica que conserva sus restos en Padua y otros argumentos).
(damiselas)
A san Antonio, como es un santo casamentero,
pidiendo matrimonio
le agobian tanto,
que yo no quiero
pedirle al santo
más que un amor sincero.
(pollos)
Yo, señorita, que soy soltero y enamorado,
la veo tan bonita
que soy sincero
que estoy pasmado
de que un soltero
no lleve usted a su lado.
Estribillo:
(damiselas)
¡Ay que zaragatero es usted!
(pollos)
¡Yo soy un caballero español!
(damiselas)
¡Yo no soy extranjera...!
(pollos)
Y abra usté el quitasol
para que no se muera de celos el sol.
(Javier)
A la sombra de una sombrilla de encaje y seda,
con voz muy queda canta el amor.
(Carolina)
A la sombra de una sombrilla son ideales
los madrigales a media voz.
(damiselas y pollos)
A la sombra de una sombrilla son ideales
los madrigales a media voz.
(pollos)
Me maravilla, cuando llegaba lo más sabroso,
que cierre la sombrilla.
(damiselas)
Lo bueno acaba
si es peligroso.
(pollos)
Pero faltaba
saber si soy dichoso.
(damiselas)
La dicha es cosa que no se alcanza tan de repente.
(pollos)
La dicha es caprichosa
mas gira y danza,
junto al que siente
que una esperanza
le alumbra suavemente.
Estribillo
(damiselas)
¡Ay que zaragatero es usted!
(pollos)
¡Yo soy un caballero español!
(damiselas)
¡Yo no soy extranjera...!
(pollos)
Y abra usté el quitasol
para que no se muera de celos el sol.
(Javier)
A la sombra de una sombrilla de encaje y seda,
con voz muy queda canta el amor.
(Carolina)
A la sombra de una sombrilla son ideales
los madrigales a media voz.
(damiselas y pollos)
A la sombra de una sombrilla son ideales
los madrigales a media voz.
(Javier y Carolina)
¡Qué amable intimidad!
¡Qué bueno el quitasol!
¡Qué gozo da sentir
las flechas del amor!
¡Amor...!
Esta es la famosa romanza «En una dehesa de la Extremadura», con su estribillo "Ay mi morena...":
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