Saludos desde el santuario de Loyola: basílica, biblioteca, museo y demás edificios construidos en torno a la casa natal de san Ignacio, el fundador de la Compañía de Jesús. Uno de ellos, que era residencia de los jóvenes jesuitas en formación, es ahora casa de espiritualidad. Aquí estoy compartiendo unos días con las contemplativas de la diócesis de Guipúzcoa, a las que imparto un cursillo de teología litúrgica. En el vídeo de arriba tienen una vista general del lugar, con los preciosos paisajes de alrededor.
La casa-fortaleza en la que nació san Ignacio es del siglo XIV. Se conservan la bodega y almacenes en la planta baja, la cocina y espacios comunes en la primera planta, las habitaciones de los señores, el oratorio, el comedor y el salón de honor en la segunda planta, y las habitaciones de los hijos y huéspedes en la tercera planta. La habitación de san Ignacio está transformada en capilla. Pueden ver sus dependencias en el siguiente vídeo:
La impresionante basílica es la parte central del edificio diseñado por el arquitecto italiano Carlo María Fontana en el siglo XVII. La cúpula tiene un diámetro de 20 metros y mide 65 metros de altura, y la fachada tiene 150 metros de longitud. Los riquísimos altares de mármoles taraceados, con esculturas de madera policromada y de plata son realmente impresionantes. Pueden ver el arte que atesora este templo en el siguiente vídeo:
El centro de espiritualidad puede acoger a varios grupos a la vez, ya que posee numerosas habitaciones, capillas, salas de reuniones y conferencias, etc.
Además, en el mismo complejo hay un albergue juvenil y otras dependencias para usos diversos.
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