Ángeles músicos, de Melozzo da Forlì

Este bellísimo ángel de pelo rizado y mirada penetrante, con túnica azul y blanca, tocando el laúd, fue pintado el año 1480 por Melozzo da Forlí (como los otros ángeles músicos que veremos más abajo).

Melozzo da Forlí (1438-1494) fue arquitecto, además de pintor. Eso se nota en sus pinturas, en las que hizo uso abundante de marcos arquitectónicos, atrevidas perspectivas y escorzos desde abajo, algo novedoso para su época, que marcó la historia de la pintura posterior. De hecho, esa particular forma de perspectiva se llama en la historia del arte "perspectiva melozziana".

Su obra más famosa fue el ábside de la iglesia de los "Santos Doce Apóstoles" de Roma, donde en 1480 pintó un fresco de gran tamaño, representando la ascensión de cristo, con presencia de los apóstoles y de ángeles músicos. Esta obra influyó mucho en el fresco del juicio final, que hizo Miguel Ángel para la Capilla Sixtina.

Por desgracia, el año 1711 se destruyó el ábside para adaptarlo a los nuevos gustos artísticos del momento. 16 partes fueron arrancadas y se conservan hasta el presente: la imagen central de Cristo, que se conserva en el palacio del Quirinal (la actual sede del presidente de Italia), un ángel, que se conserva en el museo del Prado de Madrid y 14 fragmentos más con cabezas de apóstoles y de ángeles músicos, que se conservan en la pinacoteca vaticana, dentro de los museos vaticanos.

Ángel con túnica naranja y sobretúnica amarilla tocando la viola.

Ángel con túnica verde y sobretúnica púrpura tocando la pandereta.

Ángel con túnica roja y sobretúnica verde tocando el laúd

Ángel con túnica verde y sobretúnica roja tocando el tambor y la dulzaina (que casi no se aprecia, pero se ve que la boquilla sale de su boca.

Ángel con túnica roja y sobretúnica amarilla tocando el triángulo.

Ángel con túnica marrón y sobretúnica verde tocando el violín.

Fragmento de ángeles adoradores. 

Imagen de Jesucristo, que se encontraba en el centro del ábside. Los contemporáneos pensaban que el techo estaba abierto y el Señor se salía realmente del edificio. 

Detalle de ángeles junto al pie de Cristo.