Reflexiones diarias sobre argumentos de espiritualidad y vida carmelitana, con incursiones en el mundo del arte y de la cultura

martes, 27 de mayo de 2014

Virgen María, escucha mi pena


Quiero presentarles una de las advocaciones más bonitas de la Virgen María, la llamada "Madre de Dios, escucha mi pena", también conocida como "Madre de Dios, calma mis dolores" y "Madre que siempre escucha". Es una devoción bastante popular en el Oriente cristiano. En la foto de arriba se la estoy dando a conocer a los peregrinos de OKlahoma que me acompañaron el año pasado en Israel. 

En la foto nos encontrábamos en la parroquia árabe-bizantina que hay dentro del Santo Sepulcro de Jerusalén, donde se conserva la primitiva pila bautismal de la basílica y las tumbas de varios patriarcas antiguos de Jerusalén, entre otros tesoros, y que la mayoría de los turistas y peregrinos no visita por desconocimiento.

En este icono se representa a María con la mano en el oído para poder escuchar bien las súplicas de los fieles.

En Occidente, las advocaciones de María suelen hacer referencia a un lugar donde se conserva un santuario en su honor: Virgen de Lourdes, de Fátima, de Guadalupe, del Carmen, de Loreto, del Pilar, etc.

En Oriente las advocaciones de la Virgen suelen hacer referencia a la manera de representarla en un icono, del que se hacen copias.

Pueden ver un santuario en su honor en Rusia en este video. Las explicaciones están en ruso (idioma que yo no entiendo), pero pueden ver las imágenes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario